Dilemas

19/1/13
Primero, disculparme por mi ausencia. O quizá deberías agradecérmelo, como quieras.

Esta noche vuelvo a escribir tras casi un año de parón. En esta etapa que hace poco más de dos meses comencé, necesito más que nunca recurrir a las letras, a escribir mis pensamientos fugaces para poder sacarlos de mi mente y dejarlos aquí. Quizá parezca algo inútil, "gilipollesco" - si me lo planteo de otro modo - pero el hecho de escribir algo me ayuda a aligerar mi carga mental.

Después de un año y casi tres meses, la burbuja acabó estallando. De algún modo, uno ya sabe que en un momento u otro todo se acabaría, pero pensar en eso solo provoca infundir miedos y no acabar disfrutando del momento. Pero, cuando llega el fin, la hostia te la llevas... Hagas lo que hagas.

Herido de muerte, la agonía de nuestro lazo no era más que ahogarle en un mar de dudas, sentimientos distorsionados -y muy mezclados- y contradicciones. ¿Había salvación? Puede que sí ¿La buscamos? Sí ¿La encontramos? No lo sé. La llama ya se había apagado aquél día en que, de repente, el gélido viento que soplaron sus palabras, apagó el fuego y derrumbó todo. Ya solo quedaban cenizas, heladas cenizas. Intentamos resolverlo de alguna manera; después de todo, lo que se rompe, puede arreglarse ¿No? Pero, vista su negación, no había más remedio que cambiar -entre un océano de excusas- nuestros sentimientos. No resulta fácil, es más, yo ,por mi parte, lo veo imposible. Pedirme que olvide todo aquello y tener que tratarle como a una persona cualquiera, no es algo que pueda hacer, al menos cuando se trata de una persona de tal importancia como la suya. 

Quizá piense que, porque (tal vez) ella ya haya cambiado sus sentimientos y lo tenga asimilado, yo también lo habré logrado. Pero no. Pese a que yo también me negué a gastar una segunda oportunidad -aún así sabiendo que cometería uno de los mayores errores que podré recordar- sigo con los mismos sentimientos del primer día en que la vi. Pero, en fin; las personas cambian, los sentimientos cambian... Justifiquemos el daño que nos hacemos con simple palabrería. 

Quizá seguir luchando sea una pérdida de tiempo. Quizá debería desistir y dejarle a mi "amigo", el Tiempo, que cure la herida... Pero a mí no me resulta tan fácil acabar con todo.

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Kurashi te saluda :3